Una experiencia bonita merece que se le haga eco. Los profesores del Centro de Educación Especial Ramon Suriñach empezaron una pedagogía emocional basada en la plástica, a la que llamaron Va d'Art. Se trata de hacer canalizar las frustraciones o algunas experiencias dañinas para la capacidad de aprendizaje de sus alumnos, a través de la pintura. Utilizan esta expresión plástica para darles confianza en sí mismos, reconducir esas experiencias y favorecer su comunicación, autoconocimiento y autoestima. Pero el proyecto ha ido más allá. Una de las profesoras lo ha llevado a
Mali. Un país con 11 millones de habitantes donde la mayoría viven en el desierto y con muy poca capacidad para salir del estado de pobreza en que se encuentran (es el país 175 de un total de 177 en desarrollo, según la ONU). Pues ahí es donde se ha llevado a cabo Va d'Art, en una escuela de Essakame, cerca de Tombuctú.
La maestra ha llevado pinturas, algo totalmente desconocido para ellos, para que pinten su mundo y sus paisajes y dar a conocer, de esta manera, la forma de vida de la comunidad tuareg. Los niños están encantados con esta iniciativa y se han puesto manos a la obra. Con todas esas obras se harán exposiciones en diferentes escuelas y también se pondrán a la venta. La recaudación será destinada a la escuela de Essakame.
Bonito no?
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